Películas clásicas de Disney, libros y retratos de perros son las tres cosas que colecciono desde hace años. De la primera poco tengo que contaros… ahora con Disney + lo tenemos más fácil que nunca. De la segunda tenéis un post anterior que se llama «LOS LIBROS DE PERROS QUE NO PODRÁN FALTAR EN TU LIBRERÍA» con todos los que tengo ha día de hoy, aunque ya tengo fichados varios para ampliar dentro de poco. Y la tercera, que hace que mi casa luzca más bonita, es posiblemente a la que más cariño le tengo. Es el trabajo artistas de la pintura, el dibujo, la ilustración… todos ellos dedicados completa o parcialmente a crear retratos de perros. Hoy os quiero enseñar el trabajo de seis de ellos.

El primero es Javier Aguilera. Un artista autodidacta de los pies a la cabeza. Igual te moldea una escultura (es escultor profesional, podéis ver aquí su trabajo), que te dibuja con lápices pastel o lápiz digital a tu perro. Bendito Instagram que un día me dio a conocer el trabajo de Javier. Pocos días después recibía en casa por sorpresa esta maravilla en forma de Sugaar. Me pareció increíble la forma que tuvo de resaltar su mirada y esos colores tan míos… Sin duda uno de mis mayores tesoros.

Mer Llanera es la prueba viviente de por qué menos es más. De nuevo Instagram me acercaba el trabajo de esta ilustradora que une fotografía e ilustración en muchos de sus diseños como si estuviesen hechos para ello. Fue increíble ver como unas sencillas líneas convertían una de mis fotos de Queen en algo de lo que reenamorarme. Semanas después volvía a revivirlo con una foto de Ura que estoy deseando imprimir y enmarcar en tamaño XXL.

La tercera artista es más que conocida entre quienes amamos la naturaleza y la ilustración. Laura Agustí consigue crear gracias a la técnica rotring y al lápiz retratos con los que desearíamos empapelar todos y cada uno de los rincones de nuestros hogares. Retratos sin color, con todos y cada uno de los detalles que a mí me tienen enamorada desde hace años cuando la descubrí al juzgar, y bien juzgado, un libro por su portada. El número 35 de 200 de esta pieza fue el primero en entrar a esta casa pero en cuanto la enmarqué y la colgué supe que querría un retrato de todos y cada uno de mis chuchos.

Dibujos de un fotógrafo. Lo de Ale Megale fue amor ciego a primera vista. Lo de ciego es porque yo vi esta pieza en Échale Guindas sin saber que era suya. Simplemente me encapriché y decidí que tenía que ir directa a mi estudio. Lo mejor de todo fue descubrir, días después, que los dos perritos del dibujo son dos perros a los que conocí y fotografié el mismo día que compré la obra sin saberlo. Una vez más lo sencillo hace que mis paredes estén un poquito más llenas.

¿Dónde creéis que conocí a Sara Caballería? Efectivamente, Instagram. La conocí de revote por su campaña #EmpatiaPlease y sus cómics me parecieron la leche. Otra vez mis impulsos más salvajes me empujaron a escribirle y pedirle uno de sus retratos más perros. Esta vez uno mío junto a Sugaar que recibí en formato físico en muy pocos días y que fue la primera obra que colgué en la ofi nueva. No sabría explicar lo especial que me parece lo que envuelve el trabajo de Sara… es mejor verlo.

Y para terminar, el que para mí es el gran descubrimiento del año. Andrea Cáceres, una ilustradora afincada en Nueva York que me tiene obsesionada desde hace semanas. Todavía no he tenido tiempo para pedirle nada, que lo haré, así que para saciar mis ansias me descargué e imprimí su libro para colorear perretes durante la cuarentena. En su perfil tenéis tutoriales para dibujar diferentes razas de perros. MARAVILLA.

Estos son los seis artistas que me acompañan cada día tanto en casa como en el estudio. No hay nada como invertir en arte y en el trabajo de los demás cuando está hecho con tanto amor y cariño. Quizás en unos años tenga la mayor colección de arte canino del mundo y pueda abrir un museo muy perro.

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